Me dijo que nos veríamos

sábado, 9 de mayo de 2009


Me dijo que nos veríamos pero no fue así.

Era Diciembre habíamos quedado tras miles de cartas de amor en la típica estación de tren como en tantas películas sucede. De noche, con un frío que helaba más allá de los huesos.
Habíamos quedado a eso de las 22:00. Yo vivía a las afueras así que debía coger ese tren, él me esperaría con un ramo de rosas rojas en sus brazos. Nunca antes nos habíamos visto. Yo estaba nerviosa, mi estómago estaba cerrado. Sí, por fin vería sus ojos, sus labios... ¡por fin lo vería!
Llegué a la estación a las 22:05, he de decir que mi tren se retraso unos minutos. La niebla era espesa. Busqué a un hombre joven con un ramo en sus brazos, pero no lo encontraba. Pasaron los minutos y mi espera me producía impaciencia, incertidumbre... Cuando se hizo cosa así de las 23:30 pensé que no había querido venir, que realmente no me amaba o quizás no tanto como yo a él. Metí mis manos en los bolsillos del abrigo, me coloqué correctamente mi gorro de lana y anduve a solas por esas calles frecuentadas por algunos jovenzuelos. Como ya había perdido el último tren que me llevaba a casa decidí pasar esa triste noche en un hostal, propiedad de unos amigos, que me harían buen precio.
Mi corazón estaba destrozado, creí que Gabriel me amaba, esas cartas, esas palabras... No lo podía creer. Pasé la noche con sollozos y lágrimas y apenas pude dormir.
Al día siguiente, fui a tomar el desayuno, sonaban las noticias en la radio.
A un joven lo habían tiroteado esa misma noche, en él un ramo de rosas rojas con una etiqueta que decía:


Para ti, Elisabeth,
te amaré siempre
Tu eres mi princesa.


Al escuchar esto, no pude creerlo lloré hasta lo incansable y me desmayé.
Esa tarde, lo enterraban. Fui y lo ví, sus ojos cerrados, sus labios... unos labios claros, no pude evitarlo, cerré los ojos y lo besé.
Era nuestro primer beso y su corazón ya no latía. Entonces sentí un dolor en el pecho, mi corazón dejó de latir.
Mi corazón no supo hacerse a la idea de vivir sin su otra mitad.
Esa noche enterraron a esa joven, Elisabeth, junto a Gabriel.
En sus esquelas, con letras doradas:


Por que el amor en vida
no pudo unirlos.
Elisabeth y Gabriel
En el cielo se seguirán amando.

18 comentarios:

Valdemir Reis dijo...

Hola estoy visitando esta bella zona! Felicitaciones por la excelente labor que aquí se muestra. Excelente sus publicaciones, una gran contribución. Feliz y honrado por su amistad. I, que es el único que puede caminar más rápido ... Pero que va acompañado de un amigo, por supuesto, va más allá ... Espero que su visita! Nos reuniremos siempre aquí. Votos para un fin de semana lleno de mucha alegría, mucha paz, la salud, el brillo, la bendición, la protección y el éxito. Dios es nuestra luz en este caminar. Un abrazo fraterno.
Valdemir Reis

Laura Chaparro dijo...

oH gracias por publicarme este texto!
Un besoo em seguire pasano y os seguire envianod cuanod peuda ^^çme alegro de que os haya gustado ye spero que al resto os guste =)

Ankor Inclán dijo...

Es una triste historia no siempre lo bello acaba bien, en fin preciosa historia con un final triste mil besos

Dixi dijo...

Me impresionó la historia. Intensa, conmovedora, inundada de pasión.
Toca el alma.
Un placer!

ROSA dijo...

Una historia llena de amor, con un final triste.
Me alegra encontrar una cafeteria con tantos sentimientos, me encanta tu blog, un placer para los sentidos.
Un besito Rosario

Anónimo dijo...

No hay luces ni sombras si no princesas en las tristes galerias del tiempo... Otra triste historia inacabada. Otra magnífica nube de tormenta que pasa y se fué sin decir nada.

Sr.M dijo...

Chale, seguramente vivía en el DF; pues manchadita la historia ehh, saludos!!

FUGITIVA dijo...

la historia esta media feeling, y ahi nos damos cuenta que los finales no son tan felices como lo esperamos.

NazzaPach dijo...

Hola!!!
Me pasaba por aqui!!
Hey me gusto..
Genial..
Saludos!!!
Nos estamos leyendo.. =)

"Me dijo que nos veríamos pero no fue así."



Las cosas haitualmente, nunca salen como se planean.

Saludos!

Bastet dijo...

Bonito y original blog. ¡Con lo que me gusta a mí el café! Bueno, voy a seguir paseando por aquí. Jeje Un placer :)

ooh! genial este blog...me encanta!, y lo sigo =)

NazzaPach dijo...

Wow... Si ese es el verdadero poder del amor... no entiendo como es que no se puede lograr mas de lo que se tiene...

Me gusto muchoo, está excelente ...

Saludos
Naza

Anónimo dijo...

Preciosa y triste historia, me ha encantado.
Es la primera vez que paso y seguro no será la última.
Saludos
anamorgana

MentesSueltas dijo...

Hola, paso por el cafe a dejar un abrazo.

MentesSueltas

ROSA dijo...

En mi blog tienes un premio por tu maravillosa amistad

Un besito Rosario

Juyou dijo...

pase por casualidad y me pusiste los pelos de punta.
volvere por aqui
:)

Amanecer* dijo...

Buen blog, donde se recopilan escritos de blogeros.

Preciosa historia.
El verdadero amor, va mas allá de la muerte.
Felicito a Laura por esta historia, que me ha gustado muchisimo.

Besos.